Kate Bingaman-Burt dibuja todo lo que compra
¿Quién de ustedes recuerda absolutamente todo lo que compró durante el año pasado? ¿Verdad que no es fácil hacer el recuento? Sin embargo, se puede llevar un registro metódico. Algunos tomamos nota de cada uno de los libros que leemos, otros hacen listas con las películas vistas durante el año, o de los restaurantes que visitaron... Kate Bingaman-Burt ilustra todo lo que compra.
Asomarse a esta galería de Flickr, de hecho, es darse una idea de cómo es Kate Bingaman-Burt. Por los dibujos, podemos saber que toca el ukelele, usa lentes de aumento, come langosta, bebe vino, le gusta el helado y el aguacate, no compra faldas ni pijamas y menos esmaltes. En el diario correspondiente a 2012, no hay un solo dibujo de un bolso o unos zapatos o unos aros. En todo el año.
Además, podemos darnos cuenta de que no es una compradora compulsiva. Porque llama la atención que compre las prendas una por una, siempre. En todo el año, no fue una sola vez de compras y regresó a casa con bolsas desbordantes que contuvieran vestidos, blusas, pantalones y accesorios. Kate Bingaman-Burt compra unas medias de repente, a los pocos meses adquiere un suéter, pero nada de renovar el guardarropa por temporada.
¿Será que Kate Bingaman-Burt lleva ese registro para no dejarse devorar por sus propios hábitos (o vicios) de consumo? Lo cierto es que su diario de compras va más allá de los gastos anuales y da testimonio de cierto temperamento. Si les gusta la propuesta de Kate, en Amazon se puede adquirir la versión impresa de sus diarios.
Asomarse a esta galería de Flickr, de hecho, es darse una idea de cómo es Kate Bingaman-Burt. Por los dibujos, podemos saber que toca el ukelele, usa lentes de aumento, come langosta, bebe vino, le gusta el helado y el aguacate, no compra faldas ni pijamas y menos esmaltes. En el diario correspondiente a 2012, no hay un solo dibujo de un bolso o unos zapatos o unos aros. En todo el año.
Además, podemos darnos cuenta de que no es una compradora compulsiva. Porque llama la atención que compre las prendas una por una, siempre. En todo el año, no fue una sola vez de compras y regresó a casa con bolsas desbordantes que contuvieran vestidos, blusas, pantalones y accesorios. Kate Bingaman-Burt compra unas medias de repente, a los pocos meses adquiere un suéter, pero nada de renovar el guardarropa por temporada.
¿Será que Kate Bingaman-Burt lleva ese registro para no dejarse devorar por sus propios hábitos (o vicios) de consumo? Lo cierto es que su diario de compras va más allá de los gastos anuales y da testimonio de cierto temperamento. Si les gusta la propuesta de Kate, en Amazon se puede adquirir la versión impresa de sus diarios.